|| David Marcano Duarte
Su propósito es ver, mirar, llegar a todas partes donde hay niños que requieran una ayuda, para lo que requieren donaciones de juguetes, nuevos o usados, pero en buen estado
En el marco de los 37 años siendo una plataforma informativa por excelencia, El Periodiquito sigue tras la pista de fundaciones y grupos de voluntarios que de forma desinteresada llegan hasta quienes más lo necesitan. Hoy, nos enrumbamos en un viaje de bondad para llegar hasta las poblaciones vulnerables.
Chuchu Riel Sonrisa, desde el año 2014, encauzó todas sus acciones en lo que sus creadoras han denominado, un viaje de sembrar amor en un tren de esperanza.
Karla Guerra, presidenta de la fundación, movida por una carga altamente emotiva arraigada por su madre, que siempre la condujo por el camino de ayudar a los menos poseídos, tomó la decisión de darle forma a su altruismo.
“El propósito de la fundación es ver, mirar, llegar a todas partes donde hay niños que requieran una ayuda, sobre todo es nuestra intención ir al rescate de la primera infancia, que sea en la sonrisa y alegría que causan los juegos infantiles el motor de nuestro tren”.
Recordó con nostalgia que el primer donativo realizado fue en la institución Caipa Aragua, con sede en la ciudad de Maracay, a la cual se sumó a los regalos el acompañamiento de forma voluntaria de Personajes de Disney.
En ese momento, al ver la alegría de los niños por la sorpresa, tomó la decisión de crearle a la fundación un personaje que resumiera su esencia y es cuando nace Vicente, posteriormente llamado Vicentico o “Tico”, quien, en su imagen de conductor de tren, representa lo que quieren expresar de llegar a todas partes para llevar alegría a los más pequeños.
Para avanzar en esta labor, a Guerra la acompaña un grupo de profesionales de diversas áreas, mujeres comprometidas con esta causa, ellas son: María Fernanda Peraza (Relaciones Interinstitucionales y medios de comunicación), Gabriela Prada (fotografía y proyectos) y Gabriela Briceño (Community Manager).
Sobre la dinámica de su operatividad, explicó que una vez contactada la institución que recibirá el beneficio de los regalos, proceden a visitarla para tomar en cuenta matrícula de estudiantes y sobre todo las condiciones físicas de los pequeños, ya que muchas veces se encuentran con discapacidades físicas o motoras y lo que menos que quieren es generar traumas o choque emocional en ellos al recibir un juguete que no puedan manipular o darle uso.
Pero como la intención de la fundación va más allá de llevar juguetes funcionales y juegos didácticos a los pequeños, se abrieron a la posibilidad de donar también implementos médicos, sillas de ruedas, muletas y algún otro instrumento que requieran los niños para su bienestar físico y emocional.
CENTRO DE ACOPIO PERMANENTE
La presidenta de la fundación destacó que organizacionalmente funcionan en un espacio cedido en la sede de la Galería de Arte Prada, en la calle Páez de la capital aragüeña, la cual durante todo el año funciona como centro de acopio de juguetes nuevos y usados, así como implementos médicos.
Una estrategia que les ha dado buenos resultados para obtener recursos es la puesta en práctica de la campaña “Donatón”, que consiste en colocar un stand en un centro comercial o cualquier otro lugar, para vender libros de literatura infantil y cotufas, donde además de llevarle la información a las personas, captan posibles donantes de juguetes que servirán para llevar a cabo sus ayudas
En los planes inmediatos está la instauración de la Escuela de Padres y de las buenas prácticas de la Escuela de Valores, además de rescatar el hábito de la lectura en los niños, que ven en los libros esos amigos que siempre fueron para adquirir nuevos conocimientos.
¿CÓMO MONTARSE EN EL TREN?
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Hay un lugar que contiene sueños y debemos cuidarlo, ese lugar es la niñez
